Josué [Cont] Cap. 7 El pecado de Acán.

Acán [...] de la tribu de Judá, tomó de lo que Jehová les dijo que no tomaran; y la ira de Jehová se encendió contra los hijos de Israel.
2 Después Josué envió hombres desde Jericó al pueblo de Hai [...] y les habló diciendo: Suban y vean la tierra. Y ellos subieron y observaron Hai.
3 Y volviendo a Josué, le dijeron: No suba todo el pueblo, sino suban como dos mil o tres mil hombres, y tomarán a Hai; no fatigues a todo el pueblo yendo allí, porque los de Hai son pocos.
4 Y subieron allá del pueblo como tres mil hombres, los cuales huyeron de los de Hai.
5 Y los de Hai mataron de ellos a unos treinta y seis hombres, y los siguieron desde la puerta hasta Sebarim, y los derrotaron en la bajada; por lo cual el corazón del pueblo desfalleció y vino a ser como agua.
6 Entonces Josué rompió sus vestidos, y se postró en tierra sobre su rostro delante del arca de Jehová hasta caer la tarde, él y los ancianos de Israel; y echaron polvo sobre sus cabezas.
7 Y Josué dijo: !!Ah, Señor Jehová! ¿Por qué hiciste pasar a este pueblo el Jordán, para entregarnos en las manos de los amorreos, para que nos destruyan? !!Ojalá nos hubiéramos quedado al otro lado del Jordán!

"Ojalá nos hubiéramos quedado al otro lado del Jordán!" Pff. Hay aquí un contraste impactante pero a su vez muy revelador. El pueblo de Israel derrotó a Jericó en tan sólo 7 días con el favor de Jehová. Dios estaba con ellos, pero cuando intentan tomar el segundo pueblo, mucho más pequeño que Jericó, Hai, no lo logran; le va peor y matan a 36 judíos además de derrotarlos. ¿Qué pasó? y Dios? y su favor? No estaba con ellos? Hagamos una comparación para ver que sucedió:

En Josué 2:1 para la toma de Jericó, Josué manda espías. en el 7:2 también manda a Hai. En Josué 2:24 los espías le dan las observaciones, en el 7:3 para Hai, también. En el 3 y 4 Josué y todo el pueblo reposan tres días antes de cruzar el Jordán, El arca marca el camino a seguir, el pueblo se santifica, pasan el Jordán, levantan monumentos conmemorativos que proclamara a Israel, a los otros pueblos y a sus hijos la gloria de Dios. 40 mil hombre armados -que "ni usó"- , en contraste con los tres mil hombres que fueron contra Hai. En el 5:3 Josué se encuentra con el varón de la espada desenvainada se postra y le adora: ¿Qué quieres que haga Señor? Sigue sus indicaciones de rodear Jericó por 7 días y toman Jericó.
En la toma de Hai en los mismos versículos: 7:3-4 :

Y volviendo a Josué, le dijeron: No suba todo el pueblo, sino suban como dos mil o tres mil hombres, y tomarán a Hai; no fatigues a todo el pueblo yendo allí, porque los de Hai son pocos.
4 Y subieron allá del pueblo como tres mil hombres, los cuales huyeron de los de Hai.

Todo lo anterior lo desecharon, la santificación la alabanza, la adoración, los preparativos para recibir instrucción. Todo bye.  "Qué más da, es un pueblo chiquito". "Todo lo anterior que hicimos de santificarnos, el reposo, la adoración, la alabanza...pues porque era Jericó...grande, fortificada, dura". Josué no consultó para nada a Jehová creyó en los espías y siguió las instrucciones de los espías no de Dios. Además en el 6:17 Jehová da una instrucción muy clara: 6:18 No toquen nada ni lo tomen para ustedes. y Acán en el 7:1:

Acán [...] de la tribu de Judá, tomó de lo que Jehová les dijo que no tomaran;

No sólo no lo consultaron para tomar la ciudad de Hai, no, además le robaron/desobedecieron.

10 Y Jehová dijo a Josué: Levántate; ¿por qué te postras así sobre tu rostro?11 Israel ha pecado, y aun han quebrantado mi pacto que yo les mandé; y también han tomado del anatema, y hasta han hurtado, han mentido, y aun lo han guardado entre sus enseres.12 Por esto los hijos de Israel no podrán hacer frente a sus enemigos, sino que delante de sus enemigos volverán la espalda, por cuanto han venido a ser anatema; ni estaré más con vosotros, si no destruyereis el anatema de en medio de vosotros.

 "No hagas drama Josué", siempre vamos a echarle la culpa: "¿por qué me abandonas Dios?", veamos primero sino la hemos regado. Si no andas en sus caminos: justicia, amor, verdad, si no le obedeces, no te santificas, no guardas sus mandamientos, no lo alabas, no le das gracias, no le adoras... No podrás hacerle frente a tus enemigos. 

Israel y Josué decidieron en el versículo 3 lo que iban a hacer, no le preguntaron a Dios, no esperaron ni buscaron instrucción y no se santificaron (andar en sus caminos, practicar lo bueno).

ni estaré más con vosotros, si no destruyereis el anatema de en medio de vosotros.

Hay que deshacerse de aquello que te separa de Dios y de su favor. ¿Qué es eso que guardas y quieres esconder de Dios? Eso que sabes que está mal y qué sabes que debes dejarlo pero prefieres esconderlo, eso es lo que le tienes que contar a Dios en oración, sincerarte con él y pedir instrucción. "Esconderse" de Él es imposible.

14 Os acercaréis, pues, mañana por vuestras tribus; y la tribu que Jehová tomare, se acercará por sus familias; y la familia que Jehová tomare, se acercará por sus casas; y la casa que Jehová tomare, se acercará por los varones;
15 y el que fuere sorprendido en el anatema, será quemado, él y todo lo que tiene, por cuanto ha quebrantado el pacto de Jehová, y ha cometido maldad en Israel.

Entonces en del 16 al 19, Josué hace como le manda Jehová. Primero por las tribus, y la tribú de Judá es señalada. Después por sus familias y la familia de los de Zera (primos, tíos, abuelos, hijos, padres, etc) Después de las casas representadas ahí, fue tomado Zabdi. Y de Zabdi todos los que vivían en su casa que fueran varones, de ahí fue tomado Acán. ¡¡¿¿Y LO QUEMARON??!! Sí, lo quemaron. Siempre que leía estas historias me parecía realmente que los "castigos de Dios" eran sumamente exagerados y violentos. Bueno eso era en mi ignorancia y sobre todo mientras no lo conocía para nada. Imaginemos la escena anterior y pongámonos en el lugar de Acán.  Él explica lo que hizo: 

20 Y Acán respondió a Josué diciendo: Verdaderamente yo he pecado contra Jehová el Dios de Israel, y así y así he hecho.
21 Pues vi entre los despojos un manto babilónico muy bueno, y doscientos siclos de plata, y un lingote de oro de peso de cincuenta siclos, lo cual codicié y tomé; y he aquí que está escondido bajo tierra en medio de mi tienda, y el dinero debajo de ello.

Bueno primero que nada es muy triste que "un manto babilónico muy bueno" te haga desviar la vista de tu Dios que te acaba de librar de una batalla grande y te acaba de entregar un pueblo entero en tus manos sin necesidad siquiera de pelear. Dos, vaya este Acán tuvo mucho tiempo para arrepentirse, no sé usted lector, pero yo...si viera que se van acercando poco a poco hacia donde estoy por orden de Jehová para descubrir quien tiene el anatema quizá por ahí cuando es tomada la casa de Zabdi para investigar gritaría: "Yo fui yo fui perdón perdón...", iría por las cosas que tomé y las quemaría yo mismo y pediría misericordia; diría para mí: "No maa que idiota para que las agarré". Es decir tendría temor de Dios, porque se que él es justo, pero también se que es misericordioso, pero no, Acán decidió que no diría nada, capaz que Dios se equivocaba y no lo agarraban a él. Bueno Acán no se arrepintió cuando fueron acercándose al culpable paso por paso. Si Dios fuera un malévolo no le hubiera dado chance de arrepentirse, le hubiera dicho a Josué: "Vas con Acán y lo quemas" porque Jehová sabía que Acán lo tenía, pero le dió chance de que lo pensara bien y Acán no quiso. Cuando entendí esto, me puse a revisar muchas de las historias donde yo creía que Dios era un poquito exagerado y resultó que tiene más de misericordioso que de exagerado. Sólo que los humanos nunca han querido arrepentirse de lo que hacen ni aunque se les de el chance.

Otra cosa que entendí de este pasaje es que nada se le puede ocultar a Dios tenemos que ponernos muy alertas de aquello que estamos queriendo ocultarle, tenemos que decírselo. Recordemos que estamos construyendo una relación con Él, ninguna relación sobrevive con confianza limitada o fracturada, Él nos ama. No importa lo malo que seamos si le contamos nuestros deseos incluso más impuros para que Él nos ayude a controlarlos o a eliminarlos estaremos haciendo lo correcto. De todas formas Él ya los sabe...

Imagen Original, frase original: Milton Bentancor .

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